"The real voyage of discovery
consists not in seeking new landscapes,
but in having new eyes."
Marcel Proust
A veces me descubro frente al cristal de mi ventana observando al tiempo, cual transeúnte, correr por la calle mientras la lluvia moja su pelo. Resulta extraño no saber qué día vendrás, ni que ropa tendrás puesta, ni tan siquiera poder adivinar si hará sol o será de noche cuando te vea por primera vez. A ratos no tengo apenas más que una ligera y maltrecha certeza, que no siempre logro hallar en el interior de tanta duda. Sé, en cambio, que será con estos ojos con los que te mire. Y estas manos las que, si quieres, te acaricien. Será mi vasta voz la que te recite, y mi silencio el que también te acompañe. Ahora la calma es demasiado fuerte para combatirla. Y, sin embargo, esa insana costumbre de imaginarte bombea con intensidad cuando anochece. ¿Será que a oscuras nos damos cuenta de lo realmente solos que estamos? ¿Será uno de esos miedos infantiles al que me enfrento? ¿Serás tú el misterio? ¿Tú con pelo corto o largo? ¿De qué color tienes los ojos? ¿Por qué me pregunto si serán bonitos? Ven, necesito tu abrazo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario